En previsión de la nueva ola de covid-19, se trabajó sin descanso, reduciendo a la mitad el periodo de ejecución de una planta con 18 puestos, 3 de ellos boxes de aislamiento.
Ferrovial Servicios ha ejecutado en tiempo récord (en seis semanas sobre las doce inicialmente previstas en el contrato) una nueva Unidad de Cuidados Intermedios Polivalente para el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Con sus 18 camas situadas en la planta baja del Pabellón 17, uno de los históricos del centro sanitario de la capital de Cantabria, esta unidad permite afrontar mejor la presión de la tercera ola de covid-19. De cara al futuro, es una importante estructura para cuidados de pacientes que ya no necesitan medicina intensiva pero tampoco pueden ser trasladados a una habitación de hospitalización normal.
“Éramos conscientes de la importancia de acortar en plazo de ejecución ante la nueva cresta de pandemia que se venía encima, y hemos trabajado sin descanso, incluidos festivos y fines de semana, para hacer realidad esta instalación.”, destaca el responsable de la obra, Miguel Angel Ruiz Arranz, que es también Coordinador de Servicios de Smart Hospital Cantabria (SHC), la sociedad participada por Ferrovial Servicios que terminó en 2015 las obras y equipamiento del nuevo Valdecilla, y que gestiona en el hospital santanderino doce servicios no asistenciales hasta 2034.
En un espacio de unos 450 metros han llegado a trabajar hasta 42 personas a la vez, todo un reto de coordinación, de prevención y también de precaución, ya que en la planta inmediatamente inferior se encuentra la UCI de Cardiología y se trataba de no perturbarla con las obras. En la realización de los trabajos, han tenido mucha repercusión la instalación eléctrica, de climatización y suministro de gases, dadas las características técnicas de este tipo de unidades hospitalarias. En la sala hay 15 puestos con sus correspondientes equipamientos electromédicos (que ha suministrado el propio hospital), más 3 boxes aislados acristalados con puertas correderas y climatización propia, con de presión negativa que evita la propagación fuera de ellos de los patógenos. Asimismo, hay dos puertas de acceso, una para personal sanitario que una vez franqueado da acceso a un centro médico de control con acceso visual a los pacientes y a su vez, aislado de la estancia donde se ubican, y otra dotada de una exclusa, por donde acceden los pacientes encamados transportados por los celadores.
La obra ha supuesto un contrato de más de 900.000 euros, incluido el IVA, y ha dotado a este espacio, con una buena adaptación moderna a una arquitectura tradicional, de sistemas eléctricos de seguridad frente a posibles caídas de suministro y de algunas ventajas como la iluminación individualizada y regulada por puesto de paciente. Esto permitirá combinar mejor la luz natural de que gozan los pabellones de Valdecilla con la luz artificial cuando se requiera, aumentado el confort lumínico. La unidad dispone, además de la zona de control, de una sala de descanso para personal y un área de almacén de farmacia.